Hemos llegado a un punto en el que no se contempla la actividad comercial sin tecnología; sea cual sea el producto, su venta se ha digitalizado y las herramientas digitales han irrumpido y muy probablemente mejorado la manera de venderlo.
Esto no solo resulta ventajoso para los consumidores, que observan una mejora significativa en su experiencia de compra, sino también para los vendedores: cada vez se desarrollan más herramientas con el objetivo de vender más y mejor, facilitándoles enormemente su labor.
Una buena manera de acceder a varias de esas herramientas innovadoras que ofrece ahora mismo el mercado es adquiriendo una herramienta de automatización de la fuerza ventas o SFA/CRM.
Este tipo de software, como su nombre indica, automatiza el proceso de venta y lo optimiza para permitirle al retailer alcanzar sus objetivos más fácil y rápidamente. Para lograrlo, incluye tecnología punta, ya que el mundo de las ventas está en constante evolución y es necesario mantenerse a la vanguardia para no quedar obsoleto frente a la competencia.
Son una muy buena manera de tenerlo todo integrado en un mismo sistema; las nuevas tecnologías están pensadas para facilitarnos la vida, pero pueden ser difíciles de entender o utilizar al principio; un software que incluya estas funcionalidades en una misma app resulta muy útil.
Además, una de sus grandes ventajas es el hecho de ser omnicanal; no solo el agente comercial necesita saber qué ocurre en el punto de venta; también el equipo comercial en su totalidad, el departamento de marketing, producto… la automatización de la fuerza de ventas condensa toda la información relevante y la pone a la disposición de todas las áreas de la empresa, para que se tomen las decisiones de manera conjunta y se alcancen, también conjuntamente, los objetivos comunes.
Hemos seleccionado algunas de las tecnologías más punteras del momento para que le eches un vistazo al futuro del retail y veas cómo un buen SFA/CRM puede llevarte hasta él.
Una de las funcionalidades clave para efectuar la visita perfecta a tu cliente es poder adelantarte a los problemas; así, puedes tomar la decisión pertinente con tiempo, una ventaja nada desdeñable. ¿Cómo nos permite esto la automatización de la fuerza de ventas?
Mediante la visión 360 que ofrece tendrás control sobre las 4Ps del lineal; controla los precios y promociones y la presencia y posicionamiento de tu producto y compara su situación respecto a la de la competencia.
Puede parecer algo básico y hasta puede que estés pensando, ¿esto es tecnología innovadora?
Hay diferentes maneras de conseguir una visión completa de tu lineal para tenerlo todo bajo control, pero los SFA modernos lo consiguen mediante las herramientas digitales que vemos a continuación.
Parece que ya vamos entrando en materia: el reconocimiento de imágenes, tan popular últimamente en muchos ámbitos, llega al sector del retail también, y resulta increíblemente útil.
Esta otra funcionalidad implementada en los SFA/CRM se basa en algoritmos avanzados y, con una simple foto del lineal, que manda a la nube para que sea analizada, nos ofrece toda la información que necesitamos; la disponibilidad del producto, si el precio pactado con el punto de venta está cumpliéndose, si se encuentra en promoción en ese momento y hasta cuándo, etc. Nos proporciona un informe completo del producto en cuestión con solo hacerle una foto.
Esto no solo resulta cómodo, sino increíblemente eficiente. La toma de datos es mucho más rápida y segura que la toma de datos tradicional, es decir, manual. No se puede comparar la introducción de referencias una por una manualmente con hacer una simple fotografía.
Otra herramienta en boca de todos es la realidad aumentada; hagamos aquí un breve inciso para distinguirla de la realidad virtual.
La realidad virtual nos lleva a nosotros a otro lugar, nos hace sentir rodeados de un entorno que, en realidad, no existe. La aumentada, en cambio, introduce objetos virtuales irreales en nuestra realidad existente, lo cual resulta aún más chocante al ojo humano.
Un buen ejemplo para entender cómo funciona es el juego viral de hacer un par de veranos, Pokémon Go, en el que puedes “cazar” Pokémons que van apareciendo en tu camino y que tú puedes ver a través de la pantalla de tu Smartphone como si tuvieses delante de ti.
La realidad aumentada resulta tan útil en el mundo del retail porque permite ver cómo quedarían cosas en un espacio sin disponer aún de esa cosa. Pongamos que un cliente quiere saber cómo quedaría un stand con nuestros productos en un espacio concreto; no hace falta que traigamos el stand para hacer la prueba, podemos enseñárselo en la pantalla de nuestra Tablet. De nuevo, el disponer de una herramienta de automatización de la fuerza de ventas vuelve la operación más eficiente.
Por último, echémosle un vistazo a la inteligencia artificial, aplicable a tantos sectores, pero enormemente útil en el que nos ocupa.
Los chatbots, por ejemplo, son muy apreciados por el cliente final por el hecho de que están siempre disponibles. Ofrecen una comunicación continua, sea el día que sea, sea la hora que sea. Los servicios se vuelven más personalizados.
No obstante, la inteligencia artificial no es apreciada solo por el cliente que adquiere producto, sino también por el retailer y por el agente comercial que negocia con éste. Nosotros podremos sugerirle productos que tal vez no tenga en el lineal pero que le interesa tener, basándonos en la propensión de compra de ese momento. Esto es beneficioso para ambas partes.
La inteligencia artificial incorporada en un SFA/CRM permite prevenir temas de stock y gestionar de manera eficaz nuestro inventario. Además, con todos los datos recogidos, analizará por nosotros nuestros resultados, dándonos información valiosa sobre nuestros KPIs.
En resumen, todo lo que analiza la inteligencia artificial nos va a permitir tomar mejores decisiones.
Como hemos comentado, se puede acceder a este tipo de herramientas tecnológicas a través de un SFA/CRM; además de ser una herramienta eficiente por sí sola, te permitirá estar a la vanguardia tecnológica del mundo de las ventas. ¿Qué más se puede pedir?